Forbidden City: extiende tu influencia en palacio
He tenido la oportunidad de probar el juego de mesa Forbidden City en el espacio habilitado por Diset en Heroes Comic Con Madrid. Este juego, diseñado por Reiner Knizia, me causó muy buena impresión por su frescura y sencillez. Dado que la mecánica del juego recuerda muchísimo a Carcassone, es imposible hablar de este juego sin plantear comparaciones. Tras jugar dos partidas a Forbidden City nos damos cuenta que, tanto la experiencia de juego como la estrategia a seguir difieren bastante. En mi opinión, Forbidden City introduce algunos detalles nuevos que me han parecido muy interesantes.
Ficha técnica de Forbidden City
- Número de jugadores: 2-4
- Edad recomendada: a partir de 8 años
- Tiempo de partida: 30 minutos
- Distribuidor en España: Jumbo Diset
- Diseño de juego: Reiner Knizia
- Ilustraciones: Paul Windle Design
Cómo es una partida de Forbidden City
Forbidden City es un juego que no tiene tablero como tal. Los jugadores irán creando, conforme vaya desarrollándose la partida, el mapa de un palacio. Para ello tendrán que colocar losetas de la forma que más convenga a sus intereses. Las losetas pueden tener dibujadas una o varias paredes alrededor y algunas de estas paredes pueden tener puertas. El fondo de las losetas también puede presentar colores diferentes y representar «consejeros» del color del jugador. Además, algunas losetas representan un dragón, que otorga puntos adicionales.
Inicio de la partida
La partida de Forbidden City comienza con una mesa vacía. En medio sólo hay una pagoda con cuatro habitaciones alrededor. Cada jugador recibe una pila de losetas, ordenadas al azar y colocadas boca abajo.
El turno
En cada turno, un jugador tomará la primera loseta de su pila. Dependiendo de su estrategia, la colocará ampliando el palacio, siempre siguiendo estas reglas:
- La nueva loseta debe colocarse tocando las ya colocadas
- El resultado debe ser coherente: no se pueden mezclar colores en una habitación
- No se puede «tapiar» una puerta: delante de una puerta no se debe colocar una pared cerrada
Si la colocación de la loseta provoca que se cierre una habitación, se contabilizarán los puntos.
Puntuaciones
Lo primero que hay que determinar es cuántos puntos aporta una habitación. Esto se hace contando el número de losetas que forman parte de dicha habitación. Además, se suman tres puntos por cada dragón que contenga. Por otra parte, si la habitación está conectada, mediante una puerta, con otras habitaciones, se sumará también el valor de éstas. Da igual que las habitaciones vecinas no estén terminadas, se sumará un punto por sus losetas y tres por sus dragones.
Una vez calculado el valor de una habitación, se decide quién se lleva los puntos. Como es de esperar, el ganador de estos puntos es el jugador que tenga más consejeros en la habitación, sin importar que quien la haya completado sea un adversario. Si hay empate, se reparten los puntos, redondeando hacia abajo.
Además de eso, el jugador que esté en segunda posición en número de consejeros se llevará también puntos ¿Cuántos? La mitad del valor de la habitación. De nuevo, si hay empate en el segundo puesto, se reparte el premio.
Este sistema, que puede parecer lioso en un principio, se entiende y domina rápidamente. Los puntos se van contabilizando mediante unas monedas de cartón que incluye el juego.
Fin de la partida
Cuando a los jugadores les quedan sólo dos losetas en su pila, el juego se acaba. Se contabilizan los puntos y el que más tenga ha ganado. Así de sencillo.
Estrategias en Forbidden City
Dos partidas no es que den la experiencia suficiente para dar consejos. No obstante, pude identificar algunas «buenas prácticas» para intentar arañar puntos.
Parasitar es fácil, si sabes cómo
Cuando se completa una habitación que da muchos puntos, puede ser fácil aprovecharse de ello. A veces nos tocan piezas con tres paredes que pueden, por sí solas, crear una habitación. Si alguna habitación de gran valor tiene una puerta libre, podemos colocar esta pieza junto a ella. Nuestra nueva habitación no será muy valiosa (probablemente sólo un punto) pero sumaremos el suculento premio que da la estancia vecina gracias a la puerta.
Subirse al carro
Por supuesto, si se está creando algo grande, hay que intentar arrebatar el premio a los adversarios. El objetivo es colocar más consejeros que ningún otro. No obstante, esto es difícil a veces. Puede llegar el momento en que quede claro que un jugador se va a llevar una habitación, por tener muchos consejeros ya en ella. Pero no todo está perdido: con conseguir colar un sólo consejero en la estancia habremos ganado algo. Recordemos que el segundo jugador se lleva también puntos. No habremos evitado que el otro gane puntos, pero al menos conseguiremos seguirlo más de cerca.
Una sola pared es un tesoro
Como novatos, en los primeros turnos intentábamos siempre usar cada nueva pieza para ampliar alguna habitación ya existente. No nos dábamos cuenta de que a veces conviene cerrar cuanto antes y agarrar el premio. Y esto se puede conseguir aprovechando cualquier pared de cualquier pieza. Da igual el color de la pieza, sólo nos importa usar una de sus paredes para cerrar un flanco abierto.
Mi opinión sobre Forbidden City
Como ya he dicho, me llamó la atención la sencillez del juego. Se explica perfectamente con una primera partida de prueba y las diferentes estrategias van surgiendo sobre la marcha.
Un detalle que me gustó mucho es que cada jugador roba de una pila privada. Por tanto, en cuando alguien termina su turno, ya puede estar mirando la siguiente pieza e ir pensando dónde colocarla. Esto permite ir adelantando las decisiones y reduce los tiempos de espera para todos.
¿Has jugador a Forbidden City? ¿Cómo lo valoras en comparación con otros juegos? Comparte tu opinión con los lectores de NubeOcio a través de los comentarios. También puedes hacer peticiones a través del formulario de contacto o en las redes sociales.
